lunes, 28 de febrero de 2011

Retrato de Bolívar elaborado por Omar Cruz


El artista plástico venezolano Omar Cruz, quien encontró en los archivos históricos de la creatividad una fotografía basada en el rostro del Libertador que plasmó el pintor peruano José Gil de Castro, sobre la cual el mismo Simón Bolívar diría al General Sir Robert Wilson: “Me tomo la libertad de dirigir a Ud. un retrato mío hecho en Lima con la más grande exactitud y semejanza”.

Gil de Castro fue reconocido como uno de los retratistas más importantes de la época ya que frente a su caballete posaron diferentes próceres, celebridades y por supuesto Simón Bolívar. Inspirado en ese lienzo Omar Cruz nos contó que luego de seis días intensos de búsquedas, referencias, similitudes y las descripciones físicas suministradas por personas que conocieron personalmente al Libertador el resultado fue una pieza de arte hiperrealista que pretende acercarnos un poco más con el Libertador Simón Bolívar.

¿Cómo se le ocurrió hacer este tipo de trabajo sobre el rostro del Padre de la Patria?

- Tengo una especie de sana fijación por pintar a Bolívar, es poco lo que puedo hacer para agradecerle lo que hizo por la humanidad, ojalá pudiera hacer más, sin embargo creo que nada será suficiente. Por eso se me ocurrió hacer una pieza diferente a todo lo que se ha hecho. Pensé en una escultura, un cuadro, una composición con materiales diversos, pero finalmente me salió una idea en la computadora, así que hice una especie de foto. Yo no sé si ya alguien se había sentado a ver más de mil fotos para sacar de cada una de ellas los razgos más semejantes a las descripciones físicas que se han hecho de Bolívar y luego aplicarle algunos programas de diseño gráfico en la computadora, pero siempre me he preguntado cómo sería si de repente apareciera alguna fotografía real de Bolívar, estoy seguro que se caerían muchos mitos sobre los diferentes rostros que nos han vendido falsamente, uno de ellos el de la propia Plaza Bolívar de Caracas, cuya cabeza ecuestre nada tiene que ver con la realidad.

¿No cree que por la falta de fotografías en aquella época los pintores jugaron papel determinante para la mitificación actual de los próceres?

- Indudablemente que sí. Aquellos hombres de armas no tenían el tiempo suficiente para posar por largas horas frente a los caballetes, entonces los pintores tenían que recurrir incluso a copiarse de retratos malos. Esa modalidad se ha mantenido desde aquella época hasta ahora y por ello la diversidad en el rostro del Libertador. Lo hemos visto hasta con los ojos azules, catire, de cabello liso y la mayoría de las veces sin bigote, aunque está comprobado históricamente que Bolívar usó bigote durante casi toda su vida. Pero el clásico cuadro del pintor José Gil de Castro es sin duda la mejor referencia que existe, de hecho fue realizado en 1825 justamente cuando Bolívar se cortó el bigote definitivamente. Incluso hay reseñas históricas que lo describen con barba y cabello largo atado atrás estilo cola de caballo. Pero como a los artistas no se les pueden imponer limitaciones de ningún tipo, la libre creación ha logrado que Bolívar tenga mil caras y a veces se olvidan de lo esencial, de su pensamiento.

¿Cuál es la finalidad de esta obra?

- En el marco del bicentenario de nuestra Independencia estoy preparando una exposición con diferentes técnicas y la mayoría de mis piezas refleja la figura de Bolívar. Pienso hacer una serie numerada de impresiones autentificadas en buen formato de este trabajo para quienes estén interesados. En esa búsqueda constante del verdadero rostro me he encontrado con temas muy interesantes, como por ejemplo el mestizaje, la sangre, descendencia e infinidad de descripciones que se han hecho de él. Aunque casi todas coinciden con el mismo Bolívar, indudablemente hay detractores de su obra que lo pintan como lo que nunca fue. Otros lo endiosan tanto que lo desproporcionan totalmente y aunque el arte nos permite la libertad de crear figuras alejadas de la realidad no podemos desvincular una cosa de la otra. Pienso que por encima de lo superficial, de lo físico, está el alma, está la obra y allí sí es verdad que no existe detractor que pueda manchar la grandeza de un hombre como Bolívar. Quizás esta foto no sea de gran interés y puede que hasta caiga mal a muchos, pero al menos está allí con la intención de ayudar un poco a comprender a ese hombre de carne y hueso que aún sigue haciendo tanto por nosotros, pues lo físico de Bolívar ya desapareció totalmente, pero su espíritu cabalga en cada rincón del mundo donde se sueña con una Patria mejor.

¿Tiene algún otro proyecto sobre Bolívar?

- Bolívar da para todo, él motiva a crear proyectos cada día. Millones de cosas en el mundo llevan su nombre. Tengo un proyecto engavetado porque aquí no hay la suficiente cultura para las comiquitas o la historieta. Se trata de la vida de Bolívar en dibujos animados, pero lamentablemente tendremos que esperar mucho tiempo para ver algo como lo que he soñado. Aquí la gente gasta millones de bolívares por ejemplo en una publicidad que en definitiva pasa de moda, pero es incapaz de invertir en una producción de comiquitas, pues la considera carente de penetración y allí es donde está el mayor error, nada queda más grabado en nosotros que las comiquitas, de hecho cada persona en el mundo se ha identificado alguna vez con un personaje de comiquita, pero bueno… tendremos que seguir esperando que esas personas tomen conciencia.

¿Qué reacción cree usted que tendría Bolívar si volviera en estos tiempos?

- Creo que tendría la misma reacción apasionada y libertaria de su tiempo. No creo que sería diferente, aunque al encontrarse con tanta tecnología haría cosas más grandes y hasta conquistaría y liberaría nuevos mundos. Imaginarme a un Bolívar con una computadora, con estas nuevas armas bélicas, con estos novedosos medios de comunicación, su estrategia sería asombrosa. No existiría imperio alguno que pudiera con su genio. Si el Bolívar de hace 200 años atrás pudo adelantarse a su tiempo no hay dudas de que Bolívar hoy cambiaría el curso total del mundo, incluyendo hasta el cambio climático, pues se impondría la autoridad de su pensamiento y la sociedad sería más humana y tendría más conciencia. Nos queda el compromiso de estudiar en profundidad a nuestro Libertador para poder comprender el futuro de nuestra patria, quedarnos con lo artificial, con lo físico, con el mito y la utopía sería “arar en el mar” como él mismo lo pensó tantas veces en sus delirios.

Debemos ser bolivarianos por conciencia y no por los clichés impuestos por detractores de la historia o politiqueros de oficio que lejos de resaltar la inmensa figura del gran Simón Bolívar lo deshonran ejerciendo a la perfección lo que nuestros próceres trataron de exterminar con su espada libertaria. La corrupción, la burocracia y la falta de autoridad no se pueden esconder guindando un cuadro de Bolívar o de cualquier otro prócer de nuestra Independencia. No se trata de colgar un cuadro con su imagen, sino de saber qué es lo que realmente estamos colgando y haciendo.

Fuente: Aporrea

domingo, 27 de febrero de 2011

Mil miradas de amor

Testimonios de pacientes de Misión Milagro capítulo Costa Rica



Mi nombre es Marjorie Mora, soy de Costa Rica, y agradezco al presidente Chávez por su gran sentido humanitario por medio de la Misión Milagro, una ayuda increíblemente grande a personas de bajos recursos con problemas de pterigium y Catarata de Costa Rica y todo Latinoamérica. Gracias a esta obra social tanto yo, como miles de personas hemos podido recuperar nuestra salud visual.
Muy agradecida con todo el personal de la Misión por el trato tan amable, servicial y por sobre todo de amistad, por que la atención es maravillosa.
Una vez más muchas gracias señor Hugo Chávez Frias, por su inmensa preocupación y sentido humanitario, Que Dios lo Bendiga Siempre.

Jóvenes a la vanguardia en la conformación del Polo Patriótico


El Comandante Chávez consideró que a mediados de año pudiese tenerse estructurado el gran
Polo Patriótico, por lo que solicitó acelerar el trabajo hacia la unidad

El presidente de la República Bolivariana de Venezuela, Hugo Chávez, instó a la juventud revolucionaria a colocarse al frente de la tarea de conformar el gran Polo Patriótico, que a su juicio, consolidará la unidad dentro de las fuerzas progresistas venezolanas.

“Les pido a los jóvenes que se pongan a la vanguardia de la conformación del gran Polo Patriótico para que desde ya asuman papeles de vanguardia.

Nosotros cada día iremos pasando a la retaguardia, hasta que algún día les entreguemos a ustedes el destino, y así continúen la tarea de construir esta patria socialista que nació hace 22 años”, dijo el Mandatario venezolano.

Durante su participación en la conmemoración de los 22 años del Caracazo, insistió en la necesidad de acelerar el proceso de constitución del Polo Patriótico que contribuirá en la defensa de la patria y de la Revolución Bolivariana. En ese sentido, pidió no dejar que dividan a la gran fuerza socialista.

El Comandante Chávez consideró que a mediados de año pudiese tenerse estructurado el gran Polo Patriótico, por lo que solicitó acelerar el trabajo hacia la unidad. “Lo más que les pido es que no nos dejemos dividir, cada día debe ser de reunificación, repolitización y de repolarización patria”, reiteró.

Chávez aseveró que el 2012 es un año de “definiciones supremas”, debido a que en ese diciembre el pueblo tendrá que escoger si seguir en el camino de la liberación o irse por la vía de las masacres, la represión y la pérdida de la soberanía.

“Tengo la certeza que el pueblo trabajará unido con el partido para fortalecer la unidad, la consciencia y el trabajo para que en diciembre de 2012, estoy seguro que ustedes me elegirán presidente de Venezuela”, acotó.

LLAMADO A CONTRARREVOLUCIÓN A ABANDONAR LA VIOLENCIA

Por otra parte, el Mandatario Nacional hizo un llamado a sectores contrarrevolucionariospara que eliminen de sus planes el camino de la violencia.

“Aprovecho para seguir haciendo un llamado a esos sectores de la derecha venezolana,para que desistan de cualquier escenario violento. Nosotros no permitiremos que se desate la violencia en Venezuela. Con la unión de la mayoría y el trabajo de nosotros haremos imposible la violencia y haremos la paz“, afirmó.

Por último, aseguró que este año 2011 será mejor que el 2010, en el sentido de seguir incrementando la vida, la justicia social y la paz integral del pueblo venezolano. “La cultura de la paz, de la vida esos son nuestros valores y el único camino a la paz es la justicia social, la paz social, la plaza plena, la paz nacional”, puntualizó.

Texto/Sandra Izarra Foto/Cortesía de AVN

viernes, 25 de febrero de 2011

Pacientes de la Misión Milagro 21 capitulo Costa Rica


28 de mayo del 2010

Maracay estado Aragua


Excelentísimo Señor Hugo Chávez Frías

Comandante Presidente de la Republica Bolivariana de Venezuela

Señor Comandante

Reciba usted un afectuoso saludo de parte de la delegación costarricense, nuestro agradecimiento sincero a usted y a sus colaboradores de esta noble y excelente Misión Milagro, que de forma humanitaria nos han atendido desde la Embajada en nuestro país, las atenciones en el avión cuando lo abordamos y nos condujo a este bello país, Venezuela, luego las múltiples atenciones y demostraciones de cariño, respeto y nobleza para con nosotros los ticos.

Hoy después de trece días de estar en suelo venezolano Bolivariano, manifestamos mucho agradecimiento por la solidaridad que de forma muy profesional los médicos y personal de los diferentes hospitales, aportaron su granito de arena para que fuéramos operados de nuestra vista y con la ayuda de Dios todo saliera bien a lo que también han dado de forma verbal sus recomendaciones para que nuestra recuperación total sea todo un éxito, nuestra mayor satisfacción Señor Comandante es saber que dentro de nuestra delegación, dos compañeros pacientes fueron operados después de estar cieguitos, hoy, han vuelto a ver, el sol reluciente de Venezuela y Maracay, por eso le escribimos …muchas gracias… Dios le bendiga Señor Presidente Hugo Chávez Frías y a sus colaboradores como

Hospital Cardiológico de Maracay, Hospital Militar Albano Paredes Vivas, Hospital Central de Maracay, en cuanto a nuestro hospedaje y alimentación, excelente, ya que las atenciones fueron atendidas en la sede del Liceo Militar Libertador, Base Aragua.

A los Señores Eduardo Medina Guevara (Coordinador Mision Milagro Costa Rica), Coronel Edgar Guillen, Director Hospital Militar, Teniente Coronel Luís Gudino, Jefe de apoyo logístico de Mision Milagro, Sargento Mayor de Segunda Rafael Ledezma, Sargento Mayor Manuel Bolívar, Sargento Mayor de segunda Alfredo Verenzuela, Sargento de primera Yanet Campos, Sargento de primera Jogly Cuenca

C.C. a los señores colaboradores

De usted con agradecimiento Delegación costarricense del 16 de mayo del 2010

Maduro denuncia que crean condiciones para invadir a Libia y quitarle a la OPEP uno de sus puntales


ElCanciller indicó que Venezuela aboga por la independencia, la paz y soberanía del pueblo libio / Calificó como hipocresía que algunos gobiernos occidendentales soliciten investigaciones en Libia. "¿Por qué no exigen castigo a quienes matan todos los días en Irak, Afganistán y Pakistán?"



Venezuela analiza el conflicto de Libia con objetividad, ya que se están creando condiciones para justificar una invasión y quitarle a la OPEP uno de sus pilares fundamentales.

Así lo denunció Nicolás Maduro, ministro del Poder Popular de Relaciones Exteriores, al analizar la actual situación que vive el país árabe.

Destacó que diversas agencias imperiales en manos de gobiernos occidentales, pueden estar manipulando información, tal como ocurrió en Venezuela, durante el golpe de Estado de 2002.

"Recordemos cuando todas las agencias internacionales, difundieron que el presidente Chávez era un asesino. Gracias a Dios el pueblo y la Fuerza Armada, recuperaron la democracia y se supo la verdad", apuntó.

Recordó que Libia ha jugado un papel fundamental en la consolidación de los Países No Alineados y de la Liga Árabe.

El canciller Maduro manifestó que dado que Libia es una nación vital para la OPEP, se ve con preocupación que se estén dando los primeros pasos de sececión y división. Además-subrayó-que en el país árabe también se ha iniciado un proceso de guerra civil.

"Abogamos por la independencia, la paz y soberanía del pueblo de Libia (...) No le deseamos violencia a ningún país hermano", acotó.

Calificó como hipocresía que algunos gobiernos occidentales han solicitado, internacionalmente, investigaciones y castigos en Libia. "¿Por qué no exigen castigo a quienes matan todos los días en Irak, Afganistán y Pakistán?", alegó el Canciller.

Fuente: VTV


miércoles, 23 de febrero de 2011

Despedida a un compañero de verdad



Rogelio Cedeño Castro (*)

"Cuando quiero llorar no lloro y a veces lloro sin querer", Rubén Darío Prosas Profanas.



I

Hablar de José Roberto Pacheco Aguilar (Granada, Nicaragua 1948- San José Costa Rica 2011) y de su fructífera existencia entre nosotros, constituye una tarea que no puede realizarse, con independencia de los encontrados sentimientos y del dolor que nos embarga en estas horas, desligándolo de la vida de su compañera de mil batallas, la profesora María Elena Salazar Alvarado, para quien van dedicadas estas líneas. A este siempre inquieto e infatigable granadino que me llevó, en horas muy duras de mi existencia, a recorrer hace unos años el puerto de San Carlos de Nicaragua, las Islas de Solentiname, y sobre todo, las calles y los recovecos de la ribera lacustre de su amada y bella, por múltiples motivos, ciudad natal de Granada, de la que puedo decir que me enamoré a mi primera vista, es por ello y por muchas razones, surgidas al calor de una amistad y camaradería, de casi cuatro décadas, que a Roberto lo llevaré siempre en mi memoria y en mi corazón.

II

Aquella tarde de un mes de julio, en horas avanzadas de la tarde, nos encontrábamos en el muelle lacustre del puerto de San Carlos de Nicaragua José Roberto Pacheco Aguilar, José Luis Vega Carballo, su esposa, el que hace memoria de aquellos momentos y un joven argentino que por azares del destino se convirtió en un inseparable compañero nuestro durante todo ese viaje lacustre. Mientras nos disponíamos a abordar un pequeño bote de motor para dirigirnos a la Isla Fernanda, del Archipiélago de Solentiname, los cinco observábamos las grises aguas del lago Cocibolca o de Nicaragua, pero sobre todo la manera en que aquellas se agitaban sacudiendo la pequeña embarcación. Los más escépticos acerca de esta etapa del viaje éramos José Luis Vega y yo, dadas nuestras pobres artes natatorias y la poca costumbre de abordar ese tipo de embarcaciones. Es más, me parece recordar que José Luis miraba el bote y me expresaba que no pensaba que tendría gran porvenir en su intento de abordarlo, idea a la que no dejaba de unirme, pero en secreto. Al final y con las primeras sombras de la noche emprendimos el viaje hacia las Islas de Solentiname, en un recorrido que duró más de dos horas.

III

El muelle de Granada aparecía ante nosotros, entre el claroscuro de aquella madrugada y al cabo de doce horas de viaje, en el barco que habíamos abordado al mediodía del día anterior, allá en el puerto de San Carlos, situado en la ribera oriental del lago Cocibolca. Después de un viaje de más de doce horas por aquel inmenso lago, tocando en los puertos de Morrito y San Miguelito del departamento de Río Juan, en el trascurso de una cálida y colorida tarde, pasando luego por la gigantesca Isla de Ometepe, con su activo comercio, lugar en donde el sueño ya nos había vencido, llegábamos a la ciudad de Granada. Así fue como Granada apareció, por primera vez, ante nuestros ojos, a las cinco de la mañana, mientras subíamos al cajón de un camioncito que nos llevó por aquella avenida o calle central, con sus viejas catedrales y casas de hermosas fachadas. Más tarde caminé por el Barrio indígena de Xalteva, baluarte de las tradiciones de los pueblos originarios de este continente y por la calle en que se encuentra ubicada la hermosa casa, adornada con balcones, donde nació nuestro amigo, el inquieto y perspicaz granadino José Roberto Pacheco. Los sabrosos frescos y platillos de toda clase que degustamos juntos en el gigantesco mercado de Granada y el poder a escuchar aquellos músicos, padre e hijo, un niño el segundo de ellos, cantando juntos aquella cumbia chinandegana que escuché, por primera vez, me conmovieron hasta lo más hondo y me acercaron al sentir de los habitantes de Granada, cuya calidez y sentimiento pude apreciar, fueron la nota dominante o leitmotiv de los restantes días de nuestra primera estadía en esa bella ciudad.

IV

Conocí a Roberto, hacia finales de 1973 cuando él había emigrado de Nicaragua después de haber vivido los horrores del terremoto que destruyó a Managua, en diciembre de 1972 y yo, por mi parte venía de Santiago de Chile, como si fuera un exilado en mi propia tierra de origen, después de sufrir o tratar de soportar las consecuencias del golpe militar con que el general Pinochet y los otros generales pusieron fin a los sueños y esperanzas de aquellos mil días de la Unidad Popular Chilena, un martes 11 de septiembre, de ingrata memoria. Desde entonces una larga amistad nos unió, desde que nos conocimos allá en la sede del Sindicato de Educadores Costarricense (SEC), organización en la que Roberto participó con entusiasmo desde su llegada a Costa Rica y a lo largo de toda su vida como educador en múltiples escuelas del país. Más tarde, y al lado de su compañera de toda una vida, la también educadora María Elena Salazar Alvarado, daría origen al Sindicato Patriótico de la Educación (SINPAE7 de agosto), en octubre de 1995, una organización que buscaba corregir los yerros de la dirigencia magisterial tradicional, durante la heroica huelga de aquel año con la que los trabajadores de la educación buscaban enmendar las consecuencias de una ley de pensiones(la 7531) que legitimó el saqueo de los fondos de pensiones de los educadores, creados por la ley 2248 de 1958, y dio lugar a grandes injusticias cuyas consecuencias hoy sufren muchos compañeros. Roberto además de haber trabajado en el cantón de Acosta, durante los primeros años de su vida laboral, fue director de la Escuela España de San José, de la Escuela de la Urbanización León XIII y finalmente se jubiló, hace pocos años siendo director de la Escuela Félix Arcado Montero de Santo Domingo de Heredia.

V

Este jueves 10 de febrero, después de una larga batalla contra la enfermedad falleció, en su casa de San Pablo de Heredia, mi amigo, compañero de luchas populares y hermano de verdad en las horas más duras y solitarias de la existencia, el profesor José Roberto Pacheco Aguilar, quien dio pruebas de generosidad y amor a sus semejantes poco comunes en medio de los desvalores imperantes, tan característicos de la larga pesadilla neoliberal que hoy nos abruma y nos asfixia a todos. No he podido dejar de pensar en el dolor que me causaba, desde antes y a lo largo de estos meses, su partida que sabía inevitable. Hoy sólo puedo decir hasta siempre camarada, hombre auténtico y solidario. ¡Seguiremos adelante!

(*) Profesor de la Escuela de Sociología de la UNA y Secretario de Educación del SITUN.

domingo, 6 de febrero de 2011

Los sueños llegan como la lluvia

Entrevista: Presidente Comandante Hugo Chàvez

Hay un pensamiento que dice así:

Yo espero mucho del tiempo. El tiempo. Yo espero mucho del tiempo. Su inmenso vientre contiene más esperanzas que sucesos pasados.Ese pensamiento de Simón Bolívar podría resumirse en eso, en la frase inicial. Yo espero mucho del tiempo.

Yo creo que nunca, nunca, jamás perdí ni perderé mi amor y mis raíces y mi presencia física en este pueblo que está aquí. Sabaneta.

El recuerdo así más lejano que yo tengo de mi padre: un hombre muy joven que llegaba en una bicicleta y además venía rápido y cuando iba llegando a la casa sacaba una pierna por encima y se venía en una sola. Frenaba ahí y ¡ras!, ponía la bicicleta. Mi padre ha sido un hombre muy enérgico toda la vida, yo lo admiraba y lo admiro muchísimo como mi padre. Es afrodescendiente, negro. Mi madre catira, catira pelo amarillo, llanera de nacencia y crianza como se dice. Entonces mi padre llegaba y uno salía corriendo. ¡Papá, papá que me trajiste! Bueno y recuerdo el abrazo, me agarraba y me lanzaba arriba y me agarraba duro. Un hombre fuerte mi padre.

Yo tenía tres mamás: la mamá Elena que me parió, la mamá Rosa, la abuela y la mamá Sara, Sara Moreno, nunca la voy a olvidar. Era una mujer muy linda que vivía frente a la casa vieja en la calle que hoy se llama Antonio María Bayón en Sabaneta y ahí llegó Sara Moreno de no sé dónde. Y yo recuerdo que era muy linda y yo decía que era mi mamá también, que yo tenía tres mamás. Y yo recuerdo que Sara Moreno todos los días me preparaba una taza bien grande de avena antes de ir a la escuela y nunca dejaba yo de pasar por casa de Sara a tomarme mi taza de avena.

Era muy joven y era muy linda saben. Ella tenía un marido que llegaba por las noches, y yo creo que me enamoré de Sara porque yo la celaba del marido. Nunca le dije a nadie esto, estoy confesándolo por primera vez en mi vida y yo era un niño. Pero ella me amurruñaba y me dormía y me hacía comida. Sara Moreno era mi tercera mamá.

Mi madre una fortaleza siempre, mi madre ella es llena de amor, trabajadora incansable, también maestra. Luego fíjense, ella siguiendo el ejemplo de mi padre siguió haciendo unos cursos. Mi padre seguramente la motivó y luego se graduó de maestra, luego, cuando ya nos había parido a todos nosotros.

Yo recuerdo haber ido a ver a mi madre en un salón de clase, dando clase, enseñando. Ella sobre todo alfabetizaba, se dedicó a la educación de adultos y hasta me gustaba mucho ayudarla en eso. Yo participé junto a mi madre en la alfabetización por allá por los años 60, ella era mi guía con un libro que se llamaba Abajo Cadenas: ala, pala, tapara, maraca … Así que mi madre me enseñó a enseñar a otros. Cosa bonita esa.

Bueno, yo me puse a dibujar, yo estudiaba pintura y ya estaba aprendiendo a pintar rostros y yo pinté la cara de El Látigo Chávez y lo pegue ahí, al lado de mi cama. Inventé una oración que me nació y yo todas las noches rezaba y al final del Padre Nuestro que estás en los cielos, yo decía: “Diosito santo ayúdame, Látigo Chávez donde estés te juro que yo voy a ser como tú.” Y aquello se convirtió en un motor inmenso que me movió, yo movía cielo y tierra porque yo quería ser como El Látigo Chávez.

Entonces comenzaron a ocurrir muchas cosas, producto de la voluntad que despertó del dolor, del dolor. Yo entonces comencé a acercarme por las tardes después que salía de clase, en vez de irme a jugar chapita o la pelota de goma frente al liceo, que no me iba a llevar a ninguna parte, yo me iba al estadio La Carolina. Y mi padre me dijo: “¿Hugo qué carrera universitaria vas a estudiar?”. Yo le dije: “Me gusta ingeniería papá.” “Bueno vamos a hablar allá en Mérida.”

Mi padre y mi madre … Siempre la educación, la educación, el ejemplo. Y dijo “Bueno, vamos a buscarte cupo allá, vamos a hablar con Ángel Chávez”, un tío nuestro que era profesor de la ULA.

Y yo por dentro, ¿Mérida? En Mérida no juegan béisbol. Allá es fútbol. No Dios mío, yo para Mérida no voy. ¿Y saben lo que hice? Un día llegó, nunca se me olvida, un oficial al liceo a dar una conferencia, la escuela militar. Nos llevaron a todos obligados. Yo no quería porque incluso uno veía a los militares así, desde lejos.

Bueno en resumen, el 8 de agosto de 1971 entro a la Escuela Militar, ya entonces Academia Militar, en un grupo de 375 muchachos, incluyendo unos extranjeros, un grupo de panameños, dominicanos también, un grupo de muchachos.

Pero lo mío era jugar béisbol, yo estaba era pendiente de cuándo comenzábamos a jugar béisbol y comenzamos al poco tiempo a jugar béisbol. Y nuestro manager era José Antonio Casanova, una leyenda, una leyenda. Fue manager del Caracas durante muchos años, short stop de grandes ligas, de los campeones mundiales del 41. Y el entrenador de picheo y bateo era Benítez Redondo, Héctor Benítez Redondo, un zurdo también de grandes ligas, otra estrella más de los años 40, 50. Eran nuestros entrenadores.

Yo dije: Ya está. Ésta es la mía, cuando estos hombres me conozcan bien yo por ahí busco el camino, para hacer contacto con los profesionales y todo eso pues. Yo lo veía facilito.

Ah, pero entonces me conseguí uniformado, un fusil, un polígono, el orden cerrado, las marchas, los trotes mañaneros, el estudio de la ciencia militar, de las ciencias generales también. Pero en fin, me gustó, me gustó el patio y me gustó Bolívar que estaba allá al fondo. Y el pensamiento grande allá: El que abandona todo por ser útil a su país, no pierde nada y gana todo cuanto le consagra.

Me sentí como pez en el agua. Como que descubrí entonces la esencia o parte de la esencia de la vida, mi vocación verdadera. Y poco a poco se fue como transfigurando el sueño.

Llegamos al 8 de noviembre y ese día dejamos de ser aspirantes a cadetes para transformarnos en cadetes. Por primera vez vestimos de azul, por primera vez los guantes blancos y vino el General Osorio, nuestro director, y nos dio la daga de cadete, el arma pues. Y entonces, permiso por 2 días porque en esos 3 meses uno no podía salir, un poco para pagar una deuda que yo sentía que estaba adquiriendo, para cancelarla, algo así, era el espíritu que me obligaba.

Yo me fui caminando desde El Valle, Conejo Blanco. Primero pregunté cómo llegar al Cementerio General del Sur porque yo leí entonces que ahí enterraron a El Látigo Chávez. Yo iba porque tenía por dentro un nudo, como una deuda que se vino formando, el juramento aquel, la oración aquella, yo la estaba olvidando. Y ahora quería ser soldado, me sentía soldado y yo me sentía mal por eso. Así que llegué a la tumba, vi la cripta, Isaías Látigo Chávez, murió un 16 de marzo de 1969. Pero sobre todo, además de rezar yo fui a pedir perdón. Me puse a hablar con la tumba, con el espíritu que rodeaba todo aquello. A hablar conmigo mismo, es decir, estaba como diciendo: Perdón, perdón Isaías. Ya yo no voy a seguir ese camino. Ahora soy soldado. Y cuando salí del cementerio yo estaba como liberado.

Yo formé parte y formo parte de esa primera oleada de muchachos que entramos a la Academia Militar, la vieja Escuela Militar convertida en academia a nivel universitario. Veníamos ya con la secundaria aprobada. Por primera vez en la historia militar venezolana ingresan a la Academia Militar muchachos bachilleres y comenzamos a formarnos entonces para ser Licenciados en Ciencias Militares, de rango universitario.

Pero más allá de todo lo que yo pude haber aprendido de filosofía, de la guerra, de historia económica, de historia militar, de geopolítica, estrategia y táctica, todas esas enseñanzas, hasta la ciencia militar, lo más profundo que yo aprendí en esa queridísima Academia Militar fue a amar profunda e infinitamente a mi patria. Y no sólo a amarla por decirlo, sino que aprendí realmente a amarla.

Cuando juré el 07 de julio de 1975 con mi sable de subteniente en el patio de honor de la Academia Militar, cuando yo saqué mi sable para jurar, juré en firme y juré en serio: “Jura usted delante de Dios y la bandera , defender la patria hasta perder la vida”. No sólo defenderla digo yo, amarla. Porque para defenderla hasta perder la vida necesario es amarla. El que no ame esta patria … La Patria es, en primer lugar como dice Alí Primera, el hombre, el ser humano.

Hace 400 años que mi patria está preñada -decía Alí Primera – ¿quién la ayudará a parir pa’ que se ponga bonita. Hay que amarla, hay que sentirla, hay que adorarla para poder defenderla. Entonces, yo juré ese 7 de julio de 1975 salir con aquel sable a defender esta patria, amándola y para defenderla dar incluso la vida.

Eran dos abuelos. Uno más perdido en el tiempo, un Chávez. Algunos decían que era maluco porque dejó la mujer y se fue detrás del Cabo Zamora y uno no entendía. A veces uno incluso pensaba: Oye mi abuelo era un maluco, el abuelo ese Chávez, se fue con Zamora y más nunca volvió, y dejó a la mujer y los hijos pequeños.

Yo me imagino que el abuelo Chávez que quién sabe en qué camino se quedó tirado pudiera ser uno de los que enterró a Zamora. El otro recuerdo que brota especialmente por aquí, así como brotan esos montes con la lluvia, es el recuerdo del otro abuelo. Ese es mucho más cercano, es tan cercano que uno lo siente por ahí, tan cercano que parece que rebrota. Es el de Maisanta, el último hombre a caballo.

Uno por el lado de los Chávez, de mi padre, de mi abuela, mucho más difuso y lejano, que se fue detrás de Zamora, es decir, detrás de la patria, detrás del sueño. Otro más cercano aquí, mucho más cerca que lo siento, Pedro Pérez Delgado, el último hombre a caballo, que se fue detrás del sueño, que no era un maluco ni era un asesino. Dejó a mi abuelo pequeño con Claudina y al tío Rafael. Pero no porque era maluco saben. ¡Qué va! No porque era asesino. Era un soldado revolucionario y se fue igual detrás del sueño.

Y hoy no tengo ningún temor. No tuve dos abuelos malucos. Tuve dos abuelos revolucionarios. Y me ha tocado lo mío también saben. De esos abuelos he tenido una herencia, porque esta vida que uno ha seguido ha pasado por tantas cosas, pero dentro de ella una, me imagino la misma situación por la que pasó aquel Chávez detrás del Cabo Zamora por los caminos de La Marqueseña. Y aquel Pedro Pérez Delgado, el bisabuelo que se fue por las sabanas de Apure, alzao contra Gómez.

Me imagino lo que sintieron ellos cuando dejaron a la mujer y a los muchachos chiquitos, y el rancho, y el ganado, y el perro, y el gato, y el chinchorro, y el café por la mañana. El nido pues, lo dejaron y más nunca volvieron.

Digo que a mí me tocó lo mío porque yo nunca voy a olvidar aquella noche.

Era febrero. Había cielos claros, el verano no había llegado. Y era 1992 y después de un camino medio largo ya, me tocó lo mío. Me tocó igual una madrugada llegarle a la mujer, a la negra Nancy a decirle: Negra me voy, no sé si vuelva. Y lo más duro, no se lo deseo a nadie saben. Abrir la puerta del cuarto de los muchachos y mirarlos allí, a la Rosa Virginia, tenía 12 años, con sus pelo churruscado, dormidita, arropadita. Y a la María Gabriela con su pelo de india y su cara de india, es india, tenía 9, arropadita, con un ventilador que daba vueltas. Y allá, en la esquina de allá, Huguito, el catire gordo, seguro estaban soñando. Huguito tenía 7 años.

Despedirse de los hijos, darles un beso y con cuidado para que no despertaran darles la bendición a la una, a la otra y al otro y adiós. No sé si vuelva.

Me tocó lo mío también, los dejé chiquitos pero no por maluco, por patriota. Detrás de la misma bandera de aquel Bolívar, de aquel Zamora, de aquel Chávez y de aquel Maisanta, me tocó lo mío también.

Yo recuerdo la cárcel como una escuela y aunque hubo momentos dolorosos, para mí no fue un dolor la cárcel aunque tuvo muchos dolores, pero esos dolores fueron absorbidos por el amor, por la fe, por el optimismo, por el trabajo, un trabajo permanente.

Ahora, ¿cuál fue un momento doloroso? Los primeros días fueron muy dolorosos y ahí hubo varias etapas. Recuerdo que los primeros días fueron en una soledad terrible, en una celda en un sótano muy frío porque tenía aire acondicionado todo el día y uno no sabía qué hora era. Más o menos uno calculaba que hora era por la hora que llegaba la comida. Pero no había reloj, no había tiempo, no había espacio. Yo me sentía como muerto los primeros días, las primeras horas. Era como un sepulcro aquello. Bueno entonces esos días fueron muy dolorosos; la ausencia de los hijos, los viejos, la mujer, la soledad, era como una muerte. Yo me sentía como muerto.

Pero uno fue como resucitando poco a poco. Recuerdo que llegó un sacerdote como al segundo, tercer día, con su sotana blanca. Era el sacerdote de ahí de la prisión militar esa. Había una cámara filmando ahí y él sabía, así que muy hábilmente él se puso de espalda y me dijo algunas cosas muy suavecito. Entre otras cosas me hizo saber que allá afuera había una ola, una ola de amor, un fuego divino me dijo. Ese sacerdote murió ya. Era el Padre Torres, nunca lo voy a olvidar porque él me dijo allá afuera hay un fuego divino, un amor que se desató muy grande.

Y entonces me recitó de la Biblia y me lo dejó anotado en un papelito: Maquina el impío contra el justo, tensa su arco, apunta la flecha, el arco se le partirá y la flecha se le clavará en su propio corazón.

Nunca me sentí preso en verdad, desesperado por salir de allí. No. Yo incluso estaba preparado para estar allí 20 años si había que estarlo. ¿Cuál es el problema?, decía yo. Porque asumía aquello como una etapa necesaria, me interesaba jugar un papel dentro de un proceso.

Pero yo sí estaba claro que había que empujar el viento, que había que empujar el sol, como canta el poeta. Que había que precisar mejor la ideología, que había que sembrar consciencia. En la cárcel me grabé la consigna de Samuel Robinson, Simón Rodríguez, aquella que dice: La fuerza material está en la masa y la fuerza moral en el movimiento de la masa. Y a mí se me ocurrió agregarle una tercera consigna: y la fuerza transformadora está en la masa consciente en movimiento acelerado.

Yo creo que había que pasar por la cárcel y yo no la recuerdo con dolor. Yo la recuerdo más bien a esa cárcel como un sitio donde Dios nos permitió, y a mí en lo personal, me permitió acerar el alma, fortalecer la consciencia, el espíritu, fortalecer la ideología bolivariana a través del estudio, la discusión, entrar en contacto con múltiples corrientes políticas del país.

Así que cuando pasaron 2 años, 2 meses y unos días y yo salí de aquella cárcel recuerdo que miré el sol ahí, en los monolitos en el Fuerte Tiuna, en Los Próceres.

Yo salí potenciado en todos los sentidos. Vencí los dolores, vencí los sinsabores y hoy más bien lo que hago es darle gracias a Dios por haberme permitido pasar en este camino un poco más de 2 años en una cárcel que fue una escuela, porque fue una cárcel de consciencia, de dignidad.

Yo le decía a aquellos amigos que una vez fueron a visitarme en prisión, les decía: Miren, si es que Chávez se convirtió en un mito yo quiero ayudar a destruir ese mito. Porque al país no le hace falta un mito, una leyenda. Al país le hace falta una revolución y las revoluciones no se hacen con mitos ni con leyendas.

Hace poco me llegó otro sueño, como la lluvia porque así llegan los sueños, como la lluvia. Así me llegó el de ser pintor de aquel libro. Así me llegó el sueño de ser El Látigo Chávez, me llegó de ráfaga un domingo, nunca lo voy a olvidar. Y luego me llegó el de ser soldado, también como la lluvia.

Y ahora me llegó un sueño y me llegó por allá en la esquina de un pueblo, hace poco. Íbamos después de un acto donde había mucha gente. Yo quería descansar por allá a la orilla del mar. Era en Margarita exactamente. Y entonces vamos ya cayendo el sol, íbamos cruzando una esquina para ir a un sitio a descansar un rato, íbamos sin caravana, una camioneta cualquiera. Y yo entro mirando, mirando, mirando cada esquina, mirando cada casa, tratando de mirar todo. Y de repente le digo al muchacho, al compañero que maneja ¡párate aquí!, porque vi unos niños jugando a la pelota de goma y además dije que bueno que además están unas niñas también jugando, la igualdad. Una niñas dándole y corrían más duro. Y entonces, en una silla, un anciano con el pelo blanco mirando a los niños jugar a la pelota y con una niña en las piernas. Y yo dije, ya está, ese soy yo. Éste es el último sueño.

Transcrito del documental: “Los sueños llegan como la lluvia”

Arrancó Misión Agro-Venezuela con censo nacional de productores

29.ENE.2011 / 05:27 PM /


Este sábado el Gobierno nacional inició la Misión Agro-Venezuela en todo el país, con un censo nacional de productores.

El Presidente de la República Bolivariana de Venezuela, Hugo Chávez, se reunió con su tren ejecutivo en el Palacio de Miraflores para hacer seguimiento a la misión. Se espera censar a más de 300 mil productores, quienes tendrán oportunidad de registrarse hasta el próximo 10 de febrero.

Esta misión fue lanzada el pasado 25 de enero de 2011, en el acto de firma de la Ley de Atención al Sector Agrícola, realizado en la población de Ospino, estado Portuguesa.

La Misión Agro-Venezuela es considerada como la locomotora fundamental para el plan bienal 2011-2012, y es parte de las misiones del bicentenario. Su objetivo principal es continuar impulsando la seguridad y soberanía alimentaria en el país.

Además, la nueva misión incluye política pública, seguridad y soberanía alimentaria, inversión en sectores estratégicos, convocatoria al pueblo, incremento de la superficie sembrada e incremento de la producción nacional.

Asimismo tiene como metas trazadas: incrementar la producción de cereales en un 70%, entre 2011 y 2012; incrementar en 50% la producción de maíz amarillo en 2011, hasta 1,39 millones de toneladas; en maíz blanco la meta es avanzar un 59%; y en arroz se plantea un incremento en la producción de 33%, con 1,39 millones de toneladas.

Actualmente han sido dispuestos 347 puntos tricolor, desplegados en todo el territorio nacional, en los espacios de Agro-Patria, en plantas construidas en el marco de la soberanía nacional y en numerosas plazas del país.

De los 347 puntos tricolor 247 serán fijos y 100 estarán ubicados en las plazas Bolívar de todo el país.

Itinerario de actividades

Para el 10 de marzo será firmado un gran convenio con participación de la banca privada, la banca pública y los productores.

Del 16 de marzo hasta el 15 de abril se harán jornadas masivas de entrega de financiamiento y de insumos agrícolas para iniciar a toda marcha la temporada de siembra del ciclo de invierno.

El 30 de marzo será lanzado el programa de agricultura urbana, denominado Agro-Ciudad.

Agro-Patria se encarga de desarrollar toda clase de actividades agrícolas, especialmente en el financiamiento a programas de producción y en la prestación de asesoría y asistencia técnica a terceros, realizar actividades comerciales e industriales en el área de producción agrícola, bien por sí misma o junto con otras personas naturales o jurídicas.

Hoy en día Agro-Patria cuenta con 59 sucursales más una planta de mezclado en Morón. Su cadena de comercialización la ejerce a través de las empresas Inica, Proyefa, Sehiveca, Olaca, Verica y otras tiendas y productores.

Prensa Presidencial




“... el que manda debe oír aunque sean las más duras verdades y, después de oídas, debe aprovecharse de ellas para corregir los males que produzcan los errores.”

Simón Bolivar.


Las Líneas de Chávez

25 de diciembre de 2010
"El Sermón del Cerro"

I
Para nosotros, esta Navidad tiene una significación humana de incalculable valor cristiano. Las lluvias y sus desastres le han dado presencia encarnada al pesebre pascual. En cada hombre, en cada mujer, en cada niño, está el rostro de José, María y Jesús. Como bien lo señaló el padre Numa Molina, desde su apostolado a favor de los humildes, “cada refugio es la representación viva del pesebre originario”.
¿Qué buscaban María y José aquella noche en Belén si no un refugio para que llegara al mundo el que traería las bienaventuranzas? ¿No son hoy nuestros refugios espacios de solidaridad y justicia, en los que estamos viendo nacer la esperanza viva hecha pueblo?
Quiero recordar de nuevo —y vaya que estos días de Emergencia Nacional me recuerdan tanto sus palabras— a Ludovico Silva, cuando decía: “No hay peor infierno que la falta de esperanza (…) Perder la esperanza es no tener futuro; el porvenir se nutre de ella”. ¿Y qué mejor forma de llevar esperanza y con ella la vida buena, el buen vivir, que haciéndoles justicia a quienes nunca la han tenido?
Este mes de diciembre, como un todo, pareciera rendirle honor a su sentido conclusivo del año. Por estos días, hemos visto lo más bondadoso y hermoso del ser humano, ¡cierto!, pero también su lado más mezquino y perverso, representado por algunos sectores de nuestra sociedad que encuentra siempre, en nuestro sentido de fraternidad y solidaridad, ocasión propicia para desatar todas sus agresiones, no sólo contra nuestras instituciones y el Gobierno bolivariano sino contra nuestro pueblo, a quien quisiera ver sumido por siempre en la desesperanza y en el vivir muriendo, como lo vengo reiterando en cada jornada de batalla.
II
Como cristiano radical, entiendo y asumo el santo Evangelio como salvación y liberación definitiva de todos los hombres y mujeres de buena voluntad. En tal sentido, recuerdo las palabras de Juan Pablo II en el documento “¿Qué has hecho tú de tu hermano sin techo? La iglesia ante la carencia de viviendas”, que escribiera a propósito del Año Internacional de los Sin Techo (1987) establecido por la ONU:
…salir al encuentro de quien tiene necesidad de una vivienda pertenece al espíritu de las "obras de misericordia", en función de las cuales seremos juzgados por Cristo nuestro Señor (cf. Mt. 25, 31-46).
¿Podremos nosotros, cristianos, ignorar o soslayar tal problema, cuando sabemos bien que la casa "es una condición necesaria para que el hombre pueda venir al mundo, crecer, desarrollarse, para que pueda trabajar, educar y educarse, para que los hombres puedan constituir esa unión más profunda y más fundamental que se llama ´familia´"? (Enseñanzas, 2, 1979, 314).
(…) La Iglesia, participando de "los gozos y las esperanzas, las tristezas y las angustias de los hombres de nuestro tiempo, sobre todo de los pobres y de cuantos sufren" (Gaudium et spes, 1), considera grave deber suyo asociarse a cuantos operan con dedicación y desinterés para que el problema de la casa encuentre soluciones concretas y urgentes, y para que los que carecen de techo sean objeto de la debida atención y preocupación por parte de la autoridad pública.
(…) La especulación sobre los terrenos que sirven al desarrollo edilicio y sobre la construcción de ambientes domésticos, el estado de abandono de barrios enteros o de áreas rurales privadas de calles transitables, de distribución de agua o electricidad, de escuelas o de transportes necesarios para el movimiento de las personas, son —como es sabido— algunos de los males más patentes, estrechamente ligados al problema más amplio de la casa.
Y rematará su Santidad:
“¿Cómo podríamos afirmar que se ha celebrado realmente un Año Internacional de los Sin Techo, si luego no se ha hecho nada o casi nada; si todo quedara reducido a algunas ceremonias que no comportan ningún beneficio sensible? (…) Todo esto trae a la memoria y a la reflexión las palabras consoladoras de Jesús: «Cuantas veces hicisteis eso a uno de estos, mis hermanos menores, a mí lo hicisteis» (Mt 25, 40). Él, en efecto, nació en un establo y fue reclinado «en un pesebre» por las manos amorosas de su Madre, la Virgen Santísima, porque no había lugar para ellos en la posada (cf. Lc 2, 7); y luego estuvo prófugo, lejano de su tierra y de su casa, en su primera infancia”.
Querido o querida compatriota que me lees: he traído esta larga cita para que ejerzamos la reflexión profunda que estos días santos ameritan; para que sean ustedes quienes saquen las conclusiones acerca de la justeza de nuestro camino y las decisiones que sobre el mismo hemos ido tomando radicalmente: como revolucionarios que somos, debemos ir a la raíz de todos nuestros males y problemas, de todas nuestras desdichas y sufrimientos. Nunca como antes el sentido de lo ecuménico se nos había hecho más claro: el habitar la tierra pasa por la realización del hombre en su morada y en su lugar de trabajo como extensión de la misma y para la misma; es la dignificación en su hogar y la dignificación de todas las condiciones para que esto sea posible. Por ello, hemos decidido legislar radicalmente en función de la felicidad colectiva que nos merecemos, que comienza, necesariamente, por la resolución del problema de la vivienda.
III
Esta semana, cuando apenas hemos esbozado la concepción para enfrentar la crisis, ya comenzaron a “ladrar los perros”. En sus ladridos, desconocen a nuestra Carta Magna y van contra su espíritu, alegando que estamos dando un golpe de Estado contra la misma, como justificación y preludio del golpe que ellos sí están tramando.
No puedo menos que, como Jefe de Estado, repudiar rotundamente el llamado a violar la Constitución y las leyes de la República, hecho, una vez más, por ese cuerpo podrido y atado a lo peor del pasado como lo es Fedecámaras, en la persona de su presidente, irrespetando a nuestra Fuerza Armada Bolivariana. No puede quedar impune tal llamado contra la República: vuelvo a exhortar al Ministerio Público para que actúe de acuerdo a las disposiciones que nuestras leyes contemplan y prevén al respecto.
Como lo hizo en el 2002, la oposición apátrida ha querido empañar nuestra Navidad, atentando contra el espíritu que la impregna: el espíritu de la paz y de la convivencia fraterna y solidaria. ¡No han podido ni podrán contra nosotros! Y, como en aquel entonces, no nos desprenderemos del espíritu de bienaventuranza que anima a los que seguimos a Cristo redentor. Estamos seguros que venceremos porque estamos venciendo. Junto al pueblo, conjuraremos a todos los diablos que se nos pongan por delante: se estrellarán y se seguirán estrellando como sucedió esta semana en la que intentaron desestabilizar nuevamente al país.
Nosotros estamos asumiendo, hasta las últimas consecuencias, el Evangelio del amor y de la justicia. Y al Niño Jesús lo buscamos y encontramos, cada día, en todos los excluidos y excluidas de Venezuela.
Con certeza, en esta hora dura y difícil de la Patria, Cristo levanta de nuevo su voz, y nosotros con Él, en un renovado “Sermón del Cerro”: es la buena nueva de la redención y la liberación que hoy encarna, en las palabras y en los hechos, el pueblo de Simón Bolívar.
¡Bienaventurados los Pobladores del Cerro!
¡Bienaventurados los refugiados y refugiadas!
¡Bienaventurados los soldados del Pueblo!
¡Bienaventurado el Pueblo todo!
Porque de ellos y ellas será el Reino de la Justicia Social, del Amor Supremo, de la Paz Perpetua…
Ese Reino, hombre, mujer, joven, niño que me lees, es el auténtico Cristianismo…
Es el socialismo
Es la vida plena
¡El vivir viviendo!
Hugo Chávez

Presidente Chávez celebra junto al pueblo rebelión cívico militar del 4F


4.FEB.2011 / 02:39 PM /

Comandante Hugo Chávez conmemora rebelión cívico militar del 4F en Valencia

AVN .- El presidente de la República Bolivariana de Venezuela, Hugo Chávez Frías, celebra junto al pueblo revolucionario los 19 años de la rebelión cívico militar del 4 de Febrero y rememora el día que fue el punto de partida a los cambios necesarios en el país, para dar paso a las reivindicaciones sociales de todos los venezolanos.

El Mandatario Nacional acudió Valencia, capital del estado Carabobo, donde miles de personas se conglomeraron en las adyacencias de la avenida Sesquicentenario para demostrar su orgullo y compromiso con el proceso revolucionario que lidera el presidente Hugo Chávez.

Darío Vivas, diputado a la Asamblea Nacional (AN), declaró este viernes que la celebración de las fuerzas revolucionarias en Valencia es sinónimo de la fortaleza en la conciencia del pueblo y del compromiso que los venezolanos tienen con el progreso y desarrollo del país.

Por su parte, el alcalde del municipio Vargas, estado Vargas, Alexis Toledo, comentó que este 4 de febrero se celebra por todo lo alto, “sobre todo porque es un día para conmemorar la unidad nacional que se vive desde entonces y que hoy día es sinónimo de logros y de calidad de vida”.

“Ahora más que nunca nos sentimos orgullosos y por eso tenemos que celebrar y sentirnos más comprometidos y resteados con esta revolución”, recalcó.

sábado, 5 de febrero de 2011

Chávez conmemorará en Maracaibo el 4F


Chávez conmemorará en Maracaibo el 4FA las 4 de la tarde de este viernes está previsto que se inicien los actos conmemorativos a los 19 años del 4 de febrero, con la presencia del Presidente Hugo Chávez, acompañado de dirigentes nacionales, regionales y municipales, así como la base del Partido Socialista Unido de Venezuela (PSUV) y sus aliados.

En rueda de prensa celebrada en el Museo de Arte Contemporáneo del Zulia, el vicepresidente del PSUV para occidente Francisco Arias Cárdenas, destacó que, se decidió realizar la actividad cívico militar, en el cuartel El Libertador porque significa una referencia al funcionar en ese momento como centro de operaciones para quienes soñaban con el proyecto revolucionario, por ello deciden reunirse.

”Siempre rememoramos los hechos y esta vez de manera especial en el Zulia, rumbo a los 20 años se nombrará una comisión para preparar esas actividades”, dijo Arias Cárdenas.

Añadió que “Son miles de vivencias, de anécdotas, no solamente para mi sino para cada uno de los comandantes que asumimos esa lucha”.

Arias considera además que la reivindicación de esta fecha no es hablar de triunfo, sino del respaldo que ha tenido el inicio de este proceso, queda mucho trabajo por hacer, y de esto también forma parte el relanzamiento de las líneas del partido que servirá para que esto sea más avalado por el pueblo al respaldar en cada proceso electoral del presidente Chávez.

Noticia al Día